Pastillitas

No he encontrado ningún libro escrito por un depresivo durante una depresión. He encontrado tratados médicos, alguna novela,cosas así. Pero un libro, de alguien con una depresión que se siente a sacar toda su mierda y la cuente.Ninguno.Bueno,si,alguna novela.Pero nada más empezar a leerla he sabido que no era real.
No me gustan los dramas, ni las despedidas, no me gusta llevar hasta el exceso algo tan simple como mi disconformidad con el mundo. Le han puesto nombre.Pues mejor, así tardo menos en explicarlo.
En mis depresiones anteriores fui capaz de controlar más mis estados de ánimo, de no ser voluble, pero ésta es como la "Gran Ola", viene y arrasa con todo.Es el tsunami de las depresiones. Por eso estoy tan jodida, y tan cabreada. Pero aparte de poner la lengua, tomarme las pastillitas, ir a terapia y seguir respirando,no puedo hacer nada más.Los demás se sienten impotentes conmigo y me miran con cara de frustración cuando no sé explicar con palabras concretas un estado de ánimo. Coger un cuchillo y clavármelo en el estómago sería lo único parecido que encuentro a una de las oleadas.
Las pastillas sirven para algo. El otro día, el siquiatra al que fuimos en busca de una "segunda opinión"las llamó "las pastillas de la alegría"(oooh, que alegría,que alboroto,soy parte de la puta generación Prozac).Pero sirven para algo.Sirven para ir empujando hacia el fondo esa tristeza tamaño XXL que arrastro conmigo todo el día, sirven para que me integre en la manada de borregos que funciona de lunes a viernes, buscando en el sábado noche su vía de escape. Eso se espera de mi. Tal vez ésto sea mi castigo por negarme.
Y a brochazos, con capas densas y muy marcadas, vamos cambiando los colores que me rodean, de oscuros a claros, y sonrío con más frecuencia y soy capaz de gastar bromas.Todo podría volver a la normalidad que los demás ansían en no demasiado tiempo y yo seguiré sin encontrar ese libro, sabiendo lo que guardo bajo la pintura, tomando mis pastillitas y esperando al sábado para poder ser yo un par de horas a la semana.