miércoles, noviembre 28, 2007

El mundo en una pecera

Vuelvo a vivir esperando el fin de semana...Es como si todo lo que pasase de domingo a viernes no existiera. De hecho, es como si quien ocupase el lugar que se supone es el mío,no fuera yo.
Mis conversaciones entre semana están llenas de tópicos y lugares comunes, mis cafés, mis salidas, todo, es como una imagen congelada en un televisor, esperando que el viernes su propietaria se decida a apretar el botón y poner de nuevo la vida en movimiento.
Es como contener la respiración bajo el agua,esperando, observando todo moverse a mi alrededor a cámara lenta y con imágenes borrosas. Cuando por fin salgo a la superficie y respiro, me cuesta un rato acostumbrarme y boqueo buscando un oxígeno que siento necesitar.
La rutina vuelve a golpearme, y la vieja y familiar urgencia de huir me mira escondida tras una esquina, sonriente, esperando su momento. Trato de ignorarla, pero siempre acaba ganando la partida, llevándome a su terreno.
De momento, cuando la veo asomar, miro hacia otro lado y finjo que no importa, que no me he dado cuenta. Espero que dure. Espero aprender a vivir todos los días. Dejar de funcionar con el piloto automático y comportarme como un ser humano todos los días, permitiéndome sentir.

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